A SEIS AÑOS DE MI
EXILIO, LA LUCHA CONTINUA INQUEBRANTABLE POR EL VERDADERO CAMBIO!!!
Hoy, 17 de enero de 2016 se
cumplen 2.190 días de mi exilio y MAS de 11 años de mi persecución política. La
sufrimos en carne propia mi persona, mis familiares, amigos(a), los verdaderos
autonomistas, los amantes de la libertad, los que no se someten a la
injusticia, los que no admiten el miedo y la inseguridad en su vida, los que
conquistaron la democracia y los bolivianos que siempre fueron libres y nunca
canjearon sus principios.
Sé que no hay mal que dure cien
años ni cuerpo que lo resista, sé que éstos años me los robaron, sé que nada
volverá a ser como antes, sé que mientras tenga fuerzas nada ni nadie nos hará
renunciar a buscar un futuro mejor y un presente lleno de oportunidades para
todos.
No preguntes por qué el estar tan
lejos de los nuestros duele tanto, el no poder sentirlos y querer sacarlos por
el teléfono, querer que sus manos nos toquen la cara cuando ellos tocan el
teclado al escribirnos, o atrapar su imagen de un artefacto electrónico que
suena a distancia y provoca un raro cosquilleo en el estómago. Cómo te explico
que mi compañía es diaria, que nos separa cada vez menos tiempo, que estoy con
vos y que tus decisiones jamás han dejado de importarme, que la vida sigue y
nuestra causa crece, que el dolor nos unió y el abuso nos multiplicó, hoy
sabemos mejor que antes, que nadie detendrá el camino del bienestar con
seguridad.
Qué pétreo es este exilio, cuando
las aves vuelan buscando calor y nosotros nos quedamos estáticos viendo como el
invierno acaba con las hojas, viendo esta parte del mundo pintarse de gris,
contemplando las estaciones del año que van y vienen, preguntándome ¿De qué
carajo sirve la democracia si no protege la libertad? ¿De qué sirve tener una
Nueva Constitución si no protege la vida? ¿De qué cambio nos hablan, si retrocedimos
un siglo en la política boliviana? ¿Cuál oposición si permiten que nuestra
AUTONOMÍA esté presa?
¿Quiénes nos acompañan cada día?
Las tareas cotidianas, el trabajo, las cuentas, los correos electrónicos, el
Facebook, el Twitter, el Google+. el LikedIn, el Skype, para ver por un momento
a los que uno quiere y por los que uno siempre trabajó, en los que uno siempre
creyó, las fotos de la gente que se van convirtiendo en extraños porque aunque
queramos ya no somos parte de su círculo inmediato.
Este exilio, producto del
narcotráfico, el crimen y extremismo racista, lo decidieron gente extranjera
que manipula nuestro país, el sanguinario centralismo, los fanáticos del poder,
los cambas traidores que siempre aparecen en momento de crisis, para robarse
los sueños y sobre todo el dinero de millones de autonomistas. Los que
perdieron hace mucho tiempo la fe en Bolivia y en sus habitantes, solo su
extremismo demente han logrado por un momento confundir los corazones de los
cansados de un sistema que colapsó. ¿Dónde te engañaron que no quedaban sueños?
¿Dónde te mintieron que el delito era una oportunidad? ¿Dónde te dijeron que
estamos divididos por la AUTONOMÍA entre collas y cambas? ¿Dónde el odio es un medio para
avasallar la vida del otro? ¿Dónde todo lo que existe es mío porque soy MAS
hoy? ¿Dónde aprendieron que lo de todos se puede gastar sin que el tiempo no
los cobre? y por último, que podemos cambiar el mundo sin cambiar nosotros,
echándole la culpa de nuestros errores e incapacidad a otros.
Seguiremos luchando con el alma y
con nuestra inquebrantable decisión de conquistar el mañana, seguiremos
luchando por nuestro sueño de ser parte de un país que nada lo divida,
seguiremos luchando para que todo nos motive a recorrer el camino de la
transformación donde el boliviano sea el centro de las oportunidades y el
bienestar, seguiremos luchando por nuestra democracia para que la ley se
transforme en la mejor herramienta para solucionar las grandes necesidades de
la familia boliviana, seguiremos luchando hasta que cada boliviano tenga una
caña de pescar, con la educación, con la información y con respeto mutuo,
seguiremos luchando por una sociedad justa y segura, con oportunidades y sin
diferencias.
Estoy seguro que viviremos en una
Bolivia autonómica y descentralizada, pidiéndole a Dios sus bendiciones para
que éstas necesidades se concreten, que pese al brutalidad de los crimines, que
pese al populismo salvaje, al terrible despilfarro, a la corrupción sin límite,
al imperio de la injusticia, a los traidores descubiertos, al narcotráfico que
hoy reina, está guardada en el corazón
del pueblo y que hoy están a punto de
florecer abonado por los sentimientos de esperanza que los llevará a una eterna
primavera. Nunca tranzaremos, jamás claudicaremos, siempre nos reinventaremos
en nuestra lucha permanente, superando los sacrificios que nos ha impuesto la causa
de todos los bolivianos.
POR UNA BOLIVIA CON PRESENTE Y
FUTURO MI VOTO ES “NO y NO”